La terminal de colectivos de nuestra ciudad se ha transformado literalmente en un verdadero basurero producto que no se cumple con la recolección habitual de residuos.
El contenedor colocado sobre calle Roque Saenz Peña, dentro de la vereda de la propia terminal, se ha saturado debido a la excesiva cantidad de residuos que ha recibido de los domicilios del barrio y del mismo edificio que se supone tiene que ser nuestra imagen para todos aquellos que van de paso ocasionalmente por Chepes.
La excusa parece ser el receso invernal que tiene al 50 % del personal unicamente trabajando aunque los mismos operarios se quejan ya que son solamente dos los que quedaron cumpliendo funciones y el resto se tomó las "vacaciones", incluído el secretario de obras públicas quién no ha brindado ningún tipo de respuesta o solución a los reclamos.
Pareciera que a nadie le interesa lo que sucede, a excepción de los propietarios de las viviendas cercanas ya que manifiestan con justa razón que es un foco infeccioso importante no tan solo para los pequeños que abundan como en todos los barrios sino también para los mayores que no tienen otra alternativa que pasar por el lugar. La mala previsión de los servicios públicos durante el receso a desembocado en esto que deja a las claras que no se establecen cronogramas equitativos en cuanto a la distribuición del personal para que no se resienta la recolección o se afecten otras áreas municipales.
El reclamo está planteado y sería bueno que la primera postal que los turistas o pasajeros se lleven de nuestra querida ciudad no sea la que hoy está mostrando la terminal de colectivos que se encuentra al borde de colapsar por tanta basura que recibe.
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