Aportan datos que podrían sumarse en una eventual causa contra Milani

Carlos Santader, ex secretario de Seguridad y actual candidato a diputado nacional por La Rioja, se presentó ayer, de manera espontánea, en el Juzgado Federal para aportar datos sobre el estado de salud de un ex preso político detenido en 1976. En esa detención, podría haber participado el jefe del Ejército, César Milani.

Entre los años 1976 y 1977, Santader tuvo como paciente a Pedro Adán Olivera, padre de Alfredo Ramón Olivera. Precisamente, Santader revisó a Pedro Olivera después de haber sido detenido por los militares. En ese sentido, el testigo indicó que su paciente estuvo detenido unos tres días y que en ese periodo sufrió un accidente cerebro vascular con hemiplejia.

El aporte de Santander, consistió en reforzar lo que había denunciado Ramón Olivera, la semana próxima pasada, cuando vinculó la detención de su padre con el actual jefe del Ejército argentino, César Milani.

Santander, únicamente mencionó lo referido al estado de salud de su paciente con quien pudo hablar después de haber obtenido la libertad. Asimismo, agregó que autoridades militares le habían ordenado a Pedro Olivera que abandonase la atención médica que tenía con Santander.

El médico, también estuvo encarcelado a causa de la dictadura militar entre agosto y noviembre de 1976. “Infiero que la indicación de las autoridades se debía a que yo había estado encarcelado durante tres meses”, dijo Santander en su declaración testimonial.

Santander, explicó que Olivera (padre), le comentó que las autoridades militares le dijeron que se habían equivocado con él, que en realidad al que debían detener era a su hijo, Alfredo, tal como lo hicieron después de liberarlo.

“Es mi propósito afirmar la veracidad de la declaración de Alfredo Ramón Olivera en lo que concierne a mi condición de médico de su padre, y de las consecuencias que en su salud provocó el grave trauma de la detención. Por lo que considero que Alfredo Ramón Olivera es una persona absolutamente sincera en todos sus dichos”.

Alfredo Olivera, es uno de los testigos que nombró a un teniente Milani como partícipe de la detención ilegal que soportó en la dictadura militar de 1976. Su aporte, será analizado por la Fiscalía de La Rioja para establecer si existen pruebas para iniciar una causa penal en contra de Milani o bien descarta por completo esa posibilidad. Olivera, está convencido que el teniente que él nombra es el actual jefe del Ejército Argentino, designado hace pocos días por la presidenta, Cristina Fernández de Kirchner.

Por otra parte, Santander consideró, ante EL INDEPENDIENTE, que Milani debe ser apartado de su cargo hasta tanto se esclarezcan las versiones que lo vinculan con la dictadura militar. Sostuvo, que el jefe del Ejército debe tener un actitud intachable como así también sus antecedentes.

ASCENSO RECHAZADO

Ayer por la mañana, el Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS) cuestionó, con nueva documentación, el pliego de ascenso del general César Milani. Según el diario Clarín, entre los argumentos de la postura del CELS figura "un sumario por deserción instruido contra el soldado Alberto Agapito Ledo -quien se encuentra desaparecido- en la provincia de Tucumán" y el "acta del testimonio brindado el 21 de agosto de 1984 por Ramón Alfredo Olivera ante la Comisión de Derechos Humanos de la provincia de La Rioja", en la que se denuncia que Milani "participó en un `allanamiento` que derivó en la detención de su padre, quien fue torturado en el Batallón de Ingenieros 141" y que el militar "estuvo presente y lo `hostilizó` durante un interrogatorio judicial en el que el testigo intentaba infructuosamente denunciar que había sido torturado".

En necesario indicar que ayer, la Comisión de Acuerdos, del Senado de la Nación, se reunió para analizar el pliego respecto a la designación de Milani como jefe del Ejército nacional. El debate, fue suspendido y continuará hoy por la mañana. La postura del CELS provocó que la reunión pase a un cuarto intermedio. Precisamente, la Comisión de Acuerdos solicitó información al CELS y este respondió con datos que aumentan la polémica.