Los comercios minoristas tendrán un tope de hasta 30 bultos para vender, mientras que los kioscos en los barrios tienen solamente un bulto de hasta 15 kilogramos de pirotecnia, quedando totalmente prohibida la venta ambulante.
El Subcomisario Tomás Torres anticipó fuertes controles ante la venta de pirotecnia. En ese sentido, aclaró que es el jefe de la sede del Renar en la Provincia.
La venta se refiere a comercios mayoristas y minoristas, los primeros se dividen en los de venta libre: que en la provincia no hay, y el de clase 2: que compra hasta 200 bultos para vender pirotecnia en 15 kilos que puede ser variado.
Los minorista deberán vender hasta 30 bultos. Ese control lo maneja el Repar con la Municipalidad de Capital.
Mientras que un kiosco inscripto en la municipalidad, un solo bulto hasta 15 kilogramos, y quedando prohibida la venta ambulante.
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